🏦 BNB: El token que empezó dando descuentos y terminó dando dolores de cabeza a los reguladores

Julio de 2017. Mientras el mundo cripto vivía su primer gran fiebre, Changpeng Zhao (CZ) decidió que era hora de lanzar un exchange que no solo fuera rápido, sino también barato. Así nació Binance, y con él, su token estrella: Binance Coin (BNB). Vendido a 11 centavos en su ICO, el token ofrecía descuentos en comisiones. Porque nada dice “innovación financiera” como un cupón digital.

🚀 De Ethereum a su propio reino

BNB nació como un token ERC-20 en Ethereum, pero en 2019, Binance dijo “gracias, pero no gracias” y lanzó su propia blockchain: Binance Chain. Luego vino Binance Smart Chain (BSC), porque una no era suficiente. BSC permitió crear dApps, contratos inteligentes y, por supuesto, más tokens que nadie entiende.

📈 El precio: una montaña rusa con turbo

BNB pasó de $0.11 a más de $100 en menos de 4 años. ¿La razón? Descuentos, hype, quema de tokens y una comunidad que cree que CZ es el Steve Jobs del cripto. Binance quemaba tokens cada trimestre como si fueran calorías en enero, aumentando la escasez y el precio.

🌍 Binance: de China a Malta, pasando por los tribunales

Binance empezó en China, pero cuando el gobierno dijo “no más cripto”, CZ hizo las maletas y se fue a Japón, luego a Malta, luego a Jersey, luego a... bueno, a donde lo dejaran operar. En el camino, compró Trust Wallet, lanzó Binance DEX, y creó una fundación benéfica. Todo muy noble, hasta que llegaron los reguladores.

⚖️ El drama legal: CZ y el club de los CEO encarcelados

En 2023, CZ se declaró culpable de lavado de dinero en EE.UU. y pagó $4.3 mil millones en multas. En 2024, fue sentenciado a 4 meses de prisión. Binance sobrevivió, pero el aura de invencibilidad se desvaneció. Aún así, BNB sigue siendo uno de los tokens más usados del mundo. Porque en cripto, el escándalo vende.

🧩 Conclusión Kaizen-style:

BNB es el ejemplo perfecto de cómo un simple token de descuento puede convertirse en el corazón de un imperio cripto, sobrevivir a hackeos, mudanzas internacionales, y hasta a la caída de su fundador. ¿Es BNB el futuro del dinero? Tal vez no. ¿Es el futuro del drama financiero? Absolutamente.